
En el día de ayer, 10 de agosto, se reportaron dos casos preocupantes relacionados con las inusuales altas temperaturas que azotan a las Islas Canarias. En las localidades de Tenerife y La Palma, un par de ciudadanos mayores sufrió síncopes que reflejan los riesgos asociados con el intenso calor que afecta a esta comunidad.
En Arona, Tenerife, una mujer de 69 años experimentó un desvanecimiento cerca del mediodía mientras caminaba por el Paseo Litoral. Los servicios de emergencia, el Servicio de Urgencias Canario (SUC), llegaron rápidamente al lugar y, tras evaluar su condición, determinaron que había sufrido un síncope moderado. Una vez estabilizada, fue trasladada en ambulancia al Hospital del Sur para recibir atención médica adicional.
Simultáneamente, en La Palma, un hombre de 89 años se convirtió en otra de las víctimas del golpe de calor. Este incidente ocurrió en la calle Marcelino Camacho Pérez de Garafía a la misma hora del día. Al igual que en el anterior caso, los profesionales del SUC actuaron con rapidez y eficacia para proporcionar asistencia. Después de recuperarlo, el paciente fue llevado en una ambulancia de soporte vital básico al Centro de Salud de Garafía.
Estos incidentes resaltan la importancia de estar alerta ante las condiciones climáticas extremas que pueden poner en riesgo la salud de los más vulnerables. Con las alertas de calor vigentes en la región, es fundamental que tanto los ciudadanos como las autoridades se mantengan atentos a las necesidades de las personas mayores y otros grupos de riesgo.
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