En las primeras horas de la mañana del 13 de julio, durante las festividades de la Virgen del Carmen en Mogán, tres jóvenes fueron arrestados por las fuerzas del orden tras estar involucrados en un asalto violento. La Guardia Civil y la Policía Local se hallaban en plena labor de mantener la seguridad pública cuando se recibió una alerta sobre un disturbio en la zona de una parada de autobuses.

Cuando los agentes llegaron al lugar, se encontraron con una agresión en curso. Un grupo de individuos atacaba a un hombre, que yacía en el suelo bajo el peso de la golpiza. La intervención rápida de las autoridades logró dispersar la pelea y, rápidamente, lograron identificar a uno de los agresores, quien ya era conocido por su historial delictivo en el área.

La víctima del ataque, notablemente herido y angustiado, relató a los oficiales que fue abordado por este grupo violento mientras regresaba a casa. Su testimonio reveló que el objetivo del asalto era robar sus pertenencias, incluyendo su teléfono móvil.

Los testigos presentes corroboraron el relato del agredido, describiendo la brutalidad con la que los atacantes actuaron, utilizando su número para infligir golpes cuando la víctima trató de defenderse. La indefensión del joven se hizo evidente, lo que llevaron a resaltar la salvajismo del acto ante las autoridades.

Como resultado de la confrontación, la víctima requirió asistencia médica debido a sus heridas. Ante la evidencia acumulada, la policía tomó la decisión de arrestar a los tres responsables del ataque, acusándolos de robo con violencia. Posteriormente, los detenidos fueron llevados ante el Juzgado de San Bartolomé de Tirajana, donde se ordenó su ingreso en prisión a la espera de juicio.