Crónica Canarias.

Crónica Canarias.

La princesa Leonor llega a Tenerife a bordo del 'Elcano' con casi 250 tripulantes para entrenamiento y maniobras hasta julio.

La princesa Leonor llega a Tenerife a bordo del 'Elcano' con casi 250 tripulantes para entrenamiento y maniobras hasta julio.

En los primeros días de su travesía, el Buque-Escuela 'Juan Sebastián de Elcano' ha experimentado condiciones de navegación excepcionales, marcadas por "un viento extraordinario" que ha permitido utilizar las velas casi en su totalidad. Este histórico barco de la Armada Española, que partió el 11 de enero desde el puerto de Cádiz, está llevando a cabo su XCVII Crucero de Instrucción con 76 guardamarinas a bordo, entre los cuales se encuentra la princesa Leonor. Este viernes, el buque ha llegado a Santa Cruz de Tenerife, donde fue recibido con honores y gran expectación.

El arribo a la isla canaria fue un evento notable, con un saludo de la Gesta del 25 de julio de Santa Cruz de Tenerife, que anunció la llegada del buque con disparos de cañón y el evocador aroma de pólvora. Al ritmo de marchas militares y pasodobles españoles, 'Juan Sebastián de Elcano' atracó en la capital tinerfeña a las 9:00 horas, creando un ambiente festivo y patriótico en el puerto.

Desembarcando desde los tranvías que les llevaron a la dársena de Los Llanos, los guardamarinas fueron recibidos por una multitud entusiasta. Los ciudadanos, que esperaron con aplausos y elogios, parecían ansiosos por ver a la princesa Leonor, a quien le rindieron homenaje a pesar de las medidas de seguridad implementadas para el evento. Al grito de "Viva España, Viva el Rey, Viva Tenerife", los presentes manifestaron su orgullo y calidez hacia la visitación del buque.

En una breve declaración a la prensa, el comandante de la nave, Luis Carreras-Presas, hizo hincapié en la importancia de estos días en la mar. Destacó las favorable condiciones de viento, que han facilitado una navegación casi completa a vela, una práctica que evoca la rica tradición marítima española. Carreras-Presas recordó que estos mares han sido, históricamente, un punto de paso crucial para los navegantes que se aventuraron en la conquista de América.

El comandante también subrayó que este primer tramo del crucero es fundamental para la integración y adaptación de los guardamarinas al buque y a la vida en el mar. En su travesía, los tripulantes están programados para realizar diversas actividades culturales y profesionales, que complementan su formación y disfrute personal mientras están en el extranjero.

Durante su estancia en Santa Cruz de Tenerife, los guardamarinas visitarán lugares de importancia histórica y cultural, como el Museo Militar de Almeyda y el Palacio de la Capitanía General de Canarias. "Atendemos propuestas de visitas a museos, unidades militares y actividades que permitan alcanzar una formación integral", explicó el comandante, enfatizando la necesidad de desarrollar tanto habilidades profesionales como humanas.

Aunque el 'Juan Sebastián de Elcano' no se detiene en su operativa diaria, con guardias que aseguran el funcionamiento del barco en todo momento, la visita a Santa Cruz marca el número 62 que realiza el buque a esta ciudad. Carreras-Presas expresó su agradecimiento por la cálida recepción que siempre reciben de los tinerfeños, lo que contribuye a renovar el espíritu y la energía de la tripulación.

La siguiente escala del buque tras su paso por Santa Cruz será en el Arsenal de Las Palmas de Gran Canaria el 21 de enero, antes de continuar su viaje que culminará el 21 de julio en Cádiz, tras hacer una parada en la Escuela Naval Militar de Marín. El 'Juan Sebastián de Elcano' llevará a cabo dos misiones principales durante este crucero: la formación integral de los guardamarinas y el apoyo a la acción exterior del Estado en los puertos que visitan.

Este crucero incluye 10 escalas, de las cuales 8 serán en el extranjero, llevando al buque a destinos como Salvador de Bahía y Montevideo. Con un equipo de 240 personas a bordo, incluyendo más de 30 mujeres, el barco abrirá sus puertas al público este fin de semana en horarios específicos, brindando la oportunidad a los interesados de conocer más sobre la emblemática nave.

Uno de los guardamarinas, Jaime Montaner, compartió con los medios que su jornada comienza a las 7 de la mañana, con un equilibrio entre clases y maniobras, finalizando con un tiempo de ocio. Se mostró sorprendido por la experiencia de la travesía, destacando la singularidad de navegar a vela, comparado con otro tipo de buques, lo cual resulta ser una experiencia impresionante.

Desde a bordo, los tripulantes han señalado que la vida en el mar requiere dedicación constante, un verdadero trabajo "24/7" donde el barco nunca descansa. Sin embargo, mantienen su espíritu tradicional al incorporar nuevas tecnologías que no solo mejoran la navegación, sino que también facilitan la conexión de los marineros con sus familias.