Dos concejales del PSOE han decidido dar un paso al frente y abandonar el pacto gubernamental actual en el Ayuntamiento de Güímar, que incluye a Coalición Canaria y Unidas Se Puede.

En un movimiento sorprendente, doce concejales han presentado este lunes una moción de censura contra el alcalde Gustavo Pérez, de CC, que lidera el gobierno en coalición con el PSOE y Unidas Se Puede. Este número de ediles supera el mínimo necesario para lograr la mayoría absoluta en el consistorio.

Carmen Luisa Castro Dorta, del Partido Popular y quien ya ocupó el cargo de alcaldesa en dos mandatos anteriores, está al frente de esta iniciativa que busca destituir al actual alcalde. Así lo ha anunciado el PP de Güímar en un comunicado oficial.

La moción ha sido suscrita por los nueve concejales del PP, junto con Carlos Pablo Llarena González de Nueva Canarias, además de dos ediles del PSOE que han decidido separarse del grupo de gobierno: José Miguel Hernández y Patricia Encinoso, quienes han expresado su descontento con la gestión actual.

Entre los argumentos expuestos para la moción, los firmantes han mencionado el deterioro significativo de los servicios públicos, incluyendo una crisis en la Policía Local, el bloqueo institucional por diferencias internas, el aumento excesivo de la deuda municipal y una falta de planificación en terrenos, inversiones e infraestructuras.

La situación se ha visto agravada por la inacción del alcalde, quien no detuvo a tiempo ciertas obras en Las Bajas, lo que ha llevado al Ayuntamiento a una condena de más de medio millón de euros a pagar a la empresa contratista. Asimismo, se ha señalado que el concejal de Urbanismo, Airam Puerta del PSOE, admitió en un proceso judicial haber estado al tanto de los sobrecostes, lo que implica una grave falta de responsabilidad en el manejo del interés público.

Los concejales también han puesto en tela de juicio la legitimidad de un decreto relacionado con un proyecto de saneamiento en Fátima, cuestionando el uso de firmas oficiales y el manejo financiero, temas que consideran de extrema gravedad y que requieren una pronta aclaración.

A su vez, han expresado su preocupación por el estado de las obras en el litoral, que han resultado inconclusas o con gastos inesperados altos, afectando la imagen del municipio.

Otro punto destacado por estos ediles es la creciente preocupación por la inseguridad ciudadana, resultado de la crisis en la gestión policial, lo que ha afectado a la organización de las festividades municipales y ha generado quejas en la comunidad sobre la dificultad para llevar a cabo eventos importantes.

Por otra parte, culpan al alcalde y al primer teniente de alcalde por los retrasos significativos en la creación de la Empresa Municipal de Servicios, lo que ha llevado a una pérdida considerable de tiempo y recursos públicos.

La falta de transparencia en ciertos contratos y el incumplimiento por parte de algunas empresas adjudicatarias, junto con demoras en los pagos a proveedores, también se mencionan como problemas críticos que se atribuyen directamente a la gestión de Pérez.

En una entrevista, Patricia Encinoso Pestano, uno de los ediles socialistas que se ha desvinculado del equipo de gobierno, expresó su frustración por el estancamiento de proyectos en Güímar, asegurando que su compromiso siempre ha sido el bienestar del municipio, pero que la situación actual impedía cualquier avance.

Encinoso comentó que, debido a los métodos de trabajo del gobierno, las Comisiones de Fiestas han sufrido, y esto afecta directamente a la comunidad, destacando que su intención hasta ahora ha sido crear un entorno colaborativo sin importar la identidad de los concejales.

A pesar de su separación del grupo, Encinoso reafirmó su pertenencia al PSOE, argumentando que su acción no significa un abandono del partido, y que el PSOE seguirá teniendo representación en el ayuntamiento si la moción prospera.

Por último, se espera que el pleno para discutir esta moción se convoque automáticamente en un plazo de diez días hábiles, de acuerdo con la legislación vigente.