Clavijo reaviva el acuerdo canario sobre inmigración y confía en la reforma de la ley de extranjería.
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha manifestado recientemente que el mejor camino para enfrentar la crisis migratoria que afecta a las islas es la modificación de la ley de extranjería, una situación que vive con creciente desesperación al ver que los cayucos continúan llegando sin cesar. En su intervención durante la sesión de control del Pleno del Parlamento, Clavijo subrayó la urgencia de cohesionar esfuerzos locales ante el Gobierno central, con el propósito de abordar este tema desde una posición común y buscar soluciones efectivas.
El presidente ha reafirmado su intención de volver a convocar el pacto canario por la inmigración, asegurando que es fundamental conseguir una unidad sólida en la negociación sobre la reforma de la ley de extranjería y la adecuada distribución de menores migrantes. Clavijo mostró su confianza en que esta ley será modificada, argumentando que es algo justo, necesario y decente, lo que también podría servir de ejemplo para el resto de Europa y del Estado español.
A pesar de las dificultades que enfrenta, Clavijo se siente esperanzado y dispuesto a aceptar el guante lanzado por Nueva Canarias y el Bloque Canarista de restablecer el pacto migratorio, el cual había sido declarado como "roto" tanto por esta formación política como por el PSOE. La falta de respuestas claras por parte del Gobierno central y, en ocasiones, la ausencia de decisiones que se basen en el sentido común y la humanidad, son cuestiones que el presidente ha lamentado. Sin embargo, ha elogiado al pueblo canario por su dignidad y solidaridad frente a esta crisis.
En su diálogo, Clavijo se refirió a la próxima Conferencia de Presidentes, donde espera que se presente una "propuesta cerrada" que permita un reparto ordenado de los menores migrantes, enfatizando la necesidad de que el Estado aporte los recursos económicos necesarios y que, además, se solicite ayuda a la Unión Europea formalmente.
Durante sus declaraciones, el presidente hizo hincapié en que la Conferencia de Presidentes debería convocarse al menos dos veces al año, tal y como estipula el reglamento, destacando que la falta de convocatoria ha revelado una descoordinación entre las instituciones, un fenómeno que finalmente repercute negativamente en los ciudadanos. Para Clavijo, es inaceptable que las carpas en los muelles de las islas, que recibieron críticas por parte del Gobierno del Estado, se hayan vuelto imprescindibles en el contexto actual.
Referente a Vox, que se ha situado en contra del pacto canario por la inmigración, Clavijo subrayó las dificultades para generar un clima de entendimiento cuando se utilizan conflictos políticos como arma arrojadiza y se amenazan las decisiones presupuestarias. Instó a la formación a reconsiderar su exclusión de las soluciones, reafirmando su compromiso con el respeto por los derechos de los migrantes y sugiriendo que los diputados canarios deberían actuar con autonomía, sin ceder a la influencia de un partido nacional.
Luz Reverón, portavoz del Grupo Popular, expresó su preocupación por la falta de claridad respecto a la fecha de la Conferencia de Presidentes, calificándolo como un "misterio" que parece solo una "cortina de humo" del Gobierno central. Después de criticar la confianza aún depositada en el Ejecutivo, enfatizó que no existe voluntad política para alcanzar un acuerdo en materia de inmigración, lo que en su opinión, ha llevado a la situación actual de incertidumbre.
La portavoz del PP también recordó que la condición para retomar las negociaciones sobre los menores migrantes era que el Gobierno solicitara asistencia a la UE y aceptara cooperar con Frontex, algo que no ha sucedido hasta el momento, pues el ministro del Interior solo ha pedido apoyo para África. Reverón acusó al Gobierno de obstaculizar cualquier iniciativa enfocada en el logro de un acuerdo, mientras defendía que tanto ellos, como el Gobierno canario, estaban en condiciones de pactar efectivamente.
Por otro lado, Paula Jover, portavoz adjunta de Vox, manifestó su postura al respecto, argumentando que la reforma de la ley de extranjería no es el único camino para solucionar la problemática de acogida de menores migrantes. Jover instó al presidente canario a considerar alternativas que no se han explorado y a insistir en el cumplimiento de los tratados internacionales firmados con varios países, argumentando que se ha perdido demasiado tiempo sin que se logren avanzar en las negociaciones.
Desde su posición, Jover alertó que, de proceder con la modificación de la ley de extranjería, se corre el riesgo de que los centros de acogida se vean desbordados, perpetuando el problema del "efecto llamada", y que lo correcto sería transmitir un mensaje claro de que la entrada a España solo debe hacerse de manera legal.
Finalmente, Luis Campos, portavoz de Nueva Canarias-Bloque Canarista, advirtió sobre la grave crisis que se vive en Valencia a raíz de la DANA, al mismo tiempo que hizo hincapié en el "drama" que se vive en Canarias, donde miles de migrantes llegan cada año y muchos pierden la vida en el camino. Campos insistió en que la reforma de la ley de extranjería es la opción más viable, a pesar de que su movimiento haya sido criticado como unilateral por ciertos sectores, y exhortó al presidente a restablecer el pacto migratorio para avanzar hacia una solución compartida.
David Toledo, presidente del Grupo Nacionalista, destacó la inacción del Gobierno central frente a esta "terrible" crisis migratoria, subrayando que los canarios se ven obligados a soportar la carga de una situación que ya ha resultado en la llegada de 40,000 personas durante el año, mil muertos en ruta, y un número alarmante de menores bajo tutela. La pregunta que dejó en el aire fue clara: "¿Hasta cuándo, presidente?"
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.