Los promotores de la ley de volcanes en Canarias expresan su preocupación por la agonizante y deshumanizada gestión de la reconstrucción de La Palma tras la devastadora erupción del volcán Tajogaite.
La aprobación por unanimidad en el Pleno del Parlamento de Canarias de la tramitación parlamentaria de la ley de volcanes ha sido un paso crucial respaldado por los siete grupos políticos presentes, demostrando así la urgente necesidad de proteger a los afectados por desastres naturales como este.
Juan González, portavoz de la comisión impulsora de esta ley, ha destacado la importancia de otorgar derechos a aquellos perjudicados por erupciones volcánicas, advirtiendo además que debemos estar preparados para futuros eventos de este tipo antes de que termine el siglo.
González ha criticado la falta de acción por parte de los partidos políticos, señalando que la ley es el reflejo de un plan de acción previamente presentado y desoído por las autoridades. Ha denunciado la burocracia despersonalizada y la carencia de empatía en la toma de decisiones por parte de diferentes administraciones sin una debida coordinación.
También ha recalcado la insuficiencia de las ayudas económicas, la falta de unidad política y la priorización de las carreteras sobre la vivienda, con expropiaciones no remuneradas.
A pesar de apoyar los últimos decretos aprobados en el Parlamento, los promotores continúan enfatizando la importancia de su ley, la cual consideran fundamental para garantizar una reconstrucción efectiva y justa.
La crítica hacia la lentitud y deshumanización del proceso de reconstrucción ha sido un tema recurrente, acompañado por la exigencia de un plan de salud mental en la isla y el llamado a priorizar las necesidades de la población sobre los intereses políticos.
Los representantes políticos, como Raúl Acosta, han reconocido la necesidad de ajustar la ley para evitar duplicidades entre las diferentes administraciones y garantizar una respuesta efectiva en futuros eventos.
En este sentido, se destaca la importancia de que la ley sea una herramienta dinámica y actualizable con el tiempo, que refleje la solidaridad y el compromiso de la comunidad canaria con los afectados.
Por su parte, el Grupo Popular ha valorado el esfuerzo de los promotores para abordar la crisis causada por la erupción del volcán, destacando la importancia de una ley inclusiva y orientada hacia el futuro.
En resumen, la aprobación de esta ley de volcanes en Canarias representa un paso crucial en la protección de los afectados por desastres naturales, demostrando la importancia de la cohesión política y la voluntad de superar los obstáculos burocráticos en aras del bienestar de la población.
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