La modernización del sistema de vigilancia aérea se ha llevado a cabo con éxito en el Acuartelamiento Aéreo Peñas del Chache en Lanzarote, donde el Escuadrón de Vigilancia Aérea nº22 ha culminado la instalación de un nuevo radar y radomo tras un año de esfuerzos significativos.

Según un comunicado del Ejército del Aire y del Espacio, el nuevo radar Lanza LRR ya está en funcionamiento, pendiente únicamente de las pruebas de estanqueidad necesarias para garantizar su eficacia operativa.

Este nuevo sistema de radar está siendo sometido a rigurosas pruebas de fiabilidad y sostenibilidad, para asegurar que funcione correctamente durante un mes de forma ininterrumpida, cumpliendo así con los estándares requeridos.

La sustitución forma parte del ambicioso proyecto denominado Aura, que comenzó el pasado julio de 2024, y que tiene como objetivo reemplazar los obsoletos radares Alenia RAT 31 SL/T por los modernos Lanza LRR en varios escuadrones, incluyendo los números 2, 5, 12 y 22.

Además de la instalación del nuevo radar, el escuadrón ha completado también la renovación del radomo, y en estos momentos se están llevando a cabo las optimizaciones y pruebas finales del nuevo sistema para garantizar su máxima eficiencia.

El Ejército del Aire ha implementado el radar Lanza CLOTRA 3D como medida provisional para asegurar la cobertura adecuada mientras se realizaban las obras de sustitución, enfrentándose a considerables desafíos, incluyendo los fuertes vientos característicos de la región, que complicaron la ejecución de los trabajos conforme al cronograma establecido.

Tras la correcta integración del nuevo radar en el sistema de defensa aérea, se procedió a desactivar el antiguo Alenia, que había estado operativo durante 27 años en la zona, marcando el fin de su ciclo de vida.

Durante el desmantelamiento, se instalaron andamios para facilitar la remoción de los paneles del antiguo radomo y la posterior instalación del nuevo, un proceso que se vio significativamente afectado por las condiciones climáticas adversas.

El desmontaje del viejo radomo se completó a finales de 2024, y en enero de 2025 se inició el montaje del nuevo radomo, que culminó a mediados de febrero.

Finalmente, en marzo se culminó la instalación del radar LRR, dando inicio a la fase de configuración y puesta en marcha en abril, lo que representa un avance crucial en las capacidades de defensa aérea de la región.