En un reciente evento llevado a cabo en el puerto de La Restinga, el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, llevó a cabo la presentación de la nueva embarcación de acción rápida, la Salvamar Acrux. Este nuevo recurso se destina a reforzar el dispositivo de emergencias en la isla, una medida que responde, sin duda, a la creciente preocupación por la seguridad en las aguas canarias.

Pestana estuvo acompañado de un selecto grupo de autoridades, incluyendo al general de brigada, Juan Hernández, jefe de la Zona de la Guardia Civil de Canarias, y Manuel Navarrete, teniente general al mando de Fronteras y Policía Marítima. También se unieron a la presentación el capitán marítimo de Tenerife, José Antonio Conde, y la jefa del Centro de Coordinación y Salvamento de Tenerife, María Dolores Septién, evidenciando la relevancia de esta iniciativa en las políticas de seguridad marítima del archipiélago.

La empresa Salvamento Marítimo, que opera bajo la dirección del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, ha decidido implementar esta nueva embarcación en respuesta al reciente aumento en la actividad migratoria en la zona. La Salvamar Acrux se suma a la ya existente Salvamar Adhara, ampliando así el formidable sistema de protección marítima en El Hierro.

La introducción de la Salvamar Acrux marca un hito, ya que refuerza el concepto de "salvamares itinerantes", diseñados específicamente para actuar en las áreas donde se registra un mayor tráfico de embarcaciones o en situaciones de inoperatividad de las embarcaciones existentes. Este enfoque no solo optimiza la respuesta ante emergencias, sino que también se anticipa a la gran demanda que se ha evidenciado en los últimos tiempos.

Con la llegada de esta nueva unidad, se incorpora también un equipo adicional de ocho tripulantes, distribuidos en cuatro por turno. Esta ampliación en la dotación humana refuerza el despliegue de Salvamento Marítimo en las islas, permitiendo que los equipos existentes puedan disfrutar de los descansos necesarios sin comprometer la vigilancia y respuesta ante emergencias en la zona.

A esta iniciativa se suma el refuerzo puntual de las plantillas operativas de las embarcaciones de rescate en Canarias, donde se incorporaron seis nuevos trabajadores en septiembre, todo con el objetivo de optimizar los servicios de salvamento y protección de la vida en el mar. Esto es especialmente crucial dado el notable crecimiento del número de embarcaciones que transportan a personas migrantes, una situación que ha puesto a prueba los recursos disponibles.

Finalmente, la estructura de respuesta de Salvamento Marítimo en Canarias es impresionante, con un total de once embarcaciones de rescate tipo Salvamar distribuidas en varias islas, además de cuatro patrulleras tipo Guardamar, dos helicópteros, una aeronave de ala fija, y dos centros de Coordinación de Salvamento. Todo ello, complementado con buques remolcadores itinerantes y una base de equipamiento especializado en la lucha contra la contaminación, demuestra el compromiso con la seguridad marítima y la eficacia de la respuesta ante situaciones críticas en el archipiélago canario.