El partido NC-BC considera que el vicepresidente del Gobierno de Canarias podría convertirse en el próximo Soria debido a su desprecio por las islas y exige la paralización de los permisos en Fuerteventura.

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 5 Abr.

Manuel Domínguez, vicepresidente del Gobierno de Canarias y consejero de Economía, ha defendido la legalidad de los permisos concedidos a la empresa Tenáridos, del grupo canario Satocan, para la búsqueda de tierras raras en Fuerteventura, argumentando que deben completarse los trámites correspondientes.

En respuesta a una pregunta de NC-BC en comisión parlamentaria, Domínguez afirmó que su labor es cumplir la normativa y respetar las decisiones del Parlamento, aunque está dispuesto a cambiar de postura si la legislación lo exige.

El vicepresidente aseguró que cualquier actividad de extracción respetará el medio ambiente y dejó en manos de los grupos parlamentarios la responsabilidad de modificar la ley si así lo desean.

Ante la manifestación convocada en Ajuy para el domingo, Domínguez instó a que se debata en el Parlamento antes de definir la postura final.

Por otro lado, el vicepresidente criticó la actitud de la diputada Natalia Santana por considerarla demagógica y planteó la posibilidad de que la negativa a otorgar permisos para la construcción de una vivienda en un terreno propio genere controversia.

A pesar de que todas las formaciones políticas han mostrado interés en estudiar la viabilidad de las tierras raras en Canarias, Domínguez puntualizó que deben evaluarse los posibles aspectos negativos que también podrían surgir.

El vicepresidente reiteró su compromiso de cumplir con la ley, destacando que el respeto al medio ambiente es prioritario y que sin los estudios de impacto ambiental correspondientes no se permitirá ninguna extracción.

Santana (NC-BC) criticó la opacidad del proceso y el desconocimiento de la sociedad de Fuerteventura sobre las perforaciones planeadas, que podrían tener consecuencias devastadoras según distintas instituciones locales.

El partido mostró su descontento con la actitud de Coalición Canaria en el Gobierno de Canarias, que permite la actividad en la isla a pesar de las preocupaciones planteadas.

Santana cuestionó la falta de información a la ciudadanía y el riesgo de convertir a Fuerteventura en un campo de experimentación para empresas sin valorar las consecuencias.

Por su parte, se han planteado preocupaciones sobre los posibles impactos radiológicos de las perforaciones en la salud y el ambiente de los habitantes de la isla, así como en el sector primario.

Santana advirtió a Domínguez sobre su actitud hacia el pueblo canario y su desprecio potencial, exigiendo la paralización de las autorizaciones y la realización de estudios pertinentes antes de cualquier actividad extractiva.

En conclusión, NC-BC instó al Gobierno a no permitir la extracción de tierras raras en Fuerteventura, ya que esto podría poner en peligro la isla y su biodiversidad.