En una reciente intervención, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha destacado la extraordinaria agricultura de Lanzarote, describiéndola como un "ejemplo admirable de adaptación a circunstancias climáticas extremas".

Lanzarote, catalogada como una de las regiones más áridas de Europa, sorprende con la capacidad de cultivar, en sus suelos volcánicos, variedades de viñas, frutas, cereales y legumbres, desafiando su terreno inhóspito.

Durante la celebración del 250 aniversario de Bodegas El Grifo, la bodega más antigua de Canarias y una de las más prestigiosas de España, Planas remarcó esta singuralidad de la isla.

Aún más relevante, el ministro enfatizó que esta celebración coincide con el reconocimiento en Roma del sistema agrícola de la isla, que ha sido designado como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM) por la FAO, lo que pone de relieve la importancia de este enfoque agrícola local.

"Este galardón destaca el esfuerzo de generaciones de agricultores que han transformado condiciones adversas en un ejemplo internacional de biodiversidad y sostenibilidad", añadió Planas.

En su recorrido por las viñas que adornan Lanzarote, creando pequeños oasis verdes sobre la ceniza, el ministro resaltó la capacidad del sector vitivinícola canario para incorporar técnicas innovadoras, así como prácticas de agricultura ecológica y digitalizada.

Planas subrayó que "producir vinos de alta calidad de manera compatible con la conservación del medio ambiente no es solo una obligación, sino una valiosa oportunidad que permite innovar y diferenciar nuestros productos, asegurando un futuro sólido y competitivo para las nuevas generaciones del sector."

Asimismo, el ministro mencionó una significativa inversión de 24,4 millones de euros destinada a la modernización de 300 hectáreas de regadío en la parte norte de Lanzarote, parte del ambicioso Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, una iniciativa que transformará la agricultura en la isla.

Finalmente, se destacó que la inversión total del Gobierno de España en proyectos relacionados con regadíos en Canarias asciende a 79 millones de euros, con un total de nueve proyectos que abarcan seis islas, con el objetivo de diversificar los cultivos y enriquecer la oferta agrícola de la región.