Un estudio recientemente publicado en la revista 'Science of the Total Environment' ha descubierto que las playas de la Macaronesia están actuando como sumideros de microplásticos. De acuerdo con la investigación llevada a cabo por el grupo de investigación en Química Analítica Aplicada de la Universidad de La Laguna y el grupo de investigación Azores Marine Litter de la Universidad de Las Azores, los microplásticos se están acumulando en profundidad.

El estudio se realizó en tres playas: Porto Pim en la isla de Faial, Milicias en la isla de San Miguel y Playa Grande en Tenerife. Se tomaron un total de 16 muestras en cada una de las playas y fueron analizadas en los laboratorios de ambas universidades.

Los resultados mostraron que la concentración de microplásticos aumenta a medida que nos alejamos de la costa y la gran mayoría se encuentra en capas profundas, por debajo de los 10 centímetros de profundidad. De hecho, se encontró que el 84% de los microplásticos estaban enterrados a más de 1 metro de profundidad.

En cuanto al tipo de microplásticos encontrados en estas playas, predominaban los fragmentos de plástico de color blanco y de polietileno y polipropileno. Ambos tipos de plástico son los más producidos a nivel mundial y flotan en el mar, pudiendo ser transportados largas distancias.

La similitud entre la morfología y composición de los microplásticos de estas playas se debe a que los archipiélagos de la Macaronesia se ven afectados por el giro subtropical del Atlántico Norte, que lleva basura marina de composición similar hasta las islas.

En la playa de Milicias se encontraron tanto fragmentos como espumas en cantidades similares, aunque en menor concentración que en las otras dos playas. Además, se encontraron pellets o granzas de preproducción en todas las playas.

De las tres playas estudiadas, Playa Grande presentó la mayor concentración de microplásticos en profundidad, y en todos los casos, predominaban los microplásticos de 3 a 4 milímetros de tamaño.

Este estudio pone de manifiesto la necesidad de investigar también la presencia de microplásticos en las zonas no inundables por la marea y en las capas más profundas de la playa, ya que parecen estar actuando como sumideros al acumularlos en zonas más profundas.