Lanzarote y Archipiélago Chinijo mantienen su estatus de Geoparque Mundial de la Unesco.

El Consejo de Geoparques Mundiales de la UNESCO ha decidido renovar por un período de cuatro años la distinción de Geoparque Mundial a Lanzarote y Archipiélago Chinijo.

Esta decisión se tomó después de que la Comisión Evaluadora, encargada de evaluar si ambos territorios cumplían con los requisitos necesarios, emitiera un informe favorable para mantener este reconocimiento otorgado en 2015.

En un comunicado, el presidente del Cabildo de Lanzarote, Oswaldo Betancort, expresó su satisfacción por este logro, destacando el esfuerzo realizado por el gobierno local para preservar y promover el patrimonio geológico de la isla, y mencionando la presentación próxima del Plan de Gestión del Parque Natural de los Volcanes como una muestra de este compromiso.

"Estas iniciativas se suman a otras medidas adoptadas en los últimos nueve meses, como la aprobación del reglamento del Órgano de Evaluación Ambiental, que facilitará la tramitación de normativas para el desarrollo sostenible de Lanzarote y La Graciosa", añadió Betancort.

Por otro lado, el presidente agradeció el trabajo realizado por los Centros Turísticos, liderados por el consejero Ángel Vázquez, para hacer posible la renovación de la condición de Geoparque.

El consejero insular de Medio Ambiente, Samuel Martín, afirmó que la extensión de esta distinción por cuatro años se debe en gran medida al alto nivel de concienciación ambiental de la sociedad lanzaroteña y graciosera.

Asimismo, Martín destacó que la obtención de la 'tarjeta verde' significaba que durante la evaluación de la UNESCO, se confirmó el buen funcionamiento y la calidad de la gestión en la conservación del Geoparque, valorando de manera positiva las acciones educativas y científicas desarrolladas en la zona.