Un hombre será juzgado en Santa Cruz de Tenerife por el presunto asesinato de sus padres en marzo de 2020. La Fiscalía ha pedido una pena de 40 años de cárcel por los dos delitos de asesinato, así como diez años de libertad vigilada y una indemnización de 300.000 euros para cada uno de sus dos hermanos.
Según el sumario, el hombre, quien ya había sido condenado en varias ocasiones por violencia doméstica, había consumido crack y discutió con sus padres porque no le daban dinero. Después de coger un cuchillo de 15 centímetros de hoja, atacó a su madre con dos puñaladas en el pecho y otra en un costado para finalmente degollarla mientras su padre se encontraba en el baño. Posteriormente, le asestó otras cinco cuchilladas en el tórax hasta que cayó al suelo y le cortó el cuello.
Después de cometer los asesinatos, el hombre se cambió de ropa y calzado, cogió el dinero que había en la casa, las llaves del coche de su padre y cerró la vivienda, marchando hacia un lugar donde se desprendió de las ropas ensangrentadas y el arma homicida en un contenedor de basura. Desde ahí se fue hacia el barrio del Fraile, en el municipio de Arona, donde había quedado con una prostituta y en el trayecto hacia Guaza tiró las llaves de la vivienda para acabar deambulando por la zona del Médano y Las Chafiras hasta que se entregó a la Guardia Civil y reconoció los hechos.
El juicio, con Tribunal de Jurado, arranca el próximo lunes a las 09.30 horas en la sección quinta de la Audiencia Provincial. La Fiscalía mantiene la medida de prisión provisional comunicada y sin fianza ante el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas.