LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 26 Oct.
La maestra titular de Fisiología en la Universidad de Navarra y directiva del Instituto de Investigación ISFOOD, Idoia Labayen Goñi, indicó este miércoles que los médicos expertos en Endocrinología y Nutrición, los endocrinólogos, "no" tienen la posibilidad de sugerir realizar ayuno intermitente hasta comprender sus peligros para la salud.
En la ponencia 'Apps del ayuno intermitente en el régimen de la obesidad' en el marco del 63º Congreso de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), que se está festejando en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria, la estudiosa indicó que el ayuno intermitente es un nuevo régimen para el control del peso del cuerpo y de las comorbilidades socias a la obesidad que, aceptó, tiene un "enorme éxito" en la sociedad.
Sin embargo, ha invitado a ser "muy precavidos" con exactamente el mismo por el hecho de que "todavía no hay evidencia a nivel científico" y "es muy posible que no sea aconsejable para todos" los pacientes con obesidad exactamente la misma "sucede con otros tratamientos". Por ello, apunta que van a ser los expertos los que van a deber apreciar su indicación más adelante, según informó la organización del Congreso en publicación oficial.
Labayen Goñi indicó que entre las cuestiones que se sugieren sobre el ayuno intermitente es la de "si funciona" con el modo de vida, puesto que muestra que los estudios completados son de corta duración. Añade que los tratamientos de la obesidad "son siempre y en todo momento de extendida duración e inclusive crónicos, con lo que han de ser compatibles con la vida laboral, popular y familiar de la gente que la sufren".
El ayuno intermitente se apoya en la restricción del tiempo en el que se puede comer sin que permanezca ninguna restricción de los alimentos que se tienen la posibilidad de consumir y asegura que si bien no hay un porcentaje estimado de personas que lo efectúan, tiene "éxito" a nivel popular.
La estudiosa apunta que el régimen tradicional a partir de dieta hipocalórica "fracasa en la enorme mayoría" de las situaciones por el hecho de que los pacientes acostumbran a recobrar el peso perdido, lo que cree que es porque para los expertos clínicos es bien difícil instruir, "tal como de proseguir por los pacientes, que tienen que estudiar sobre la composición sobre nutrición de los alimentos y supervisar las proporciones que ingieren".
Sin embargo, el ayuno intermitente es "sencillísimo de argumentar, solo hay que señalar un horario para comer y ayunar el resto del tiempo", y para el tolerante es simple "de comprender y utilizar".
En cuanto a los desenlaces relacionados con el perder peso asimismo "son sutiles", no obstante Labayen apostilla que entre las "primordiales intranquilidades es la viable pérdida de masa muscular como resultado del prolongado tiempo de ayuno", siendo la pérdida de masa magra un "efecto indeseado" de los tratamientos de pérdida de peso, puesto que "implica la disminución del gasto energético y, consecuentemente, la restauración del peso perdido".
Por ello, ha dicho, pertence a las cuestiones que se están estudiando. De todos métodos, ha incidido en la "relevancia" de asistir a un endocrino en el momento en que se desea comenzar un régimen de pérdida de peso, "mucho más importante si cabe en la situacion del ayuno intermitente" pues "no" se conocen "sus probables resultados perjudiciales y, además de esto, para muchos pacientes puede estar desaconsejado".
En relación con esto, muestra que en la actualidad "no" se puede sugerir realizar ayuno intermitente hasta estar "seguros de que es eficiente, posible y no implica peligros para la salud" pues "hay colectivos para los que está contraindicado y, generalmente, no se tiene que hacer sin supervisión médica por el hecho de que podría tener riegos para la salud".
En el ayuno es la restricción de la ventana de nutrición (número de horas en las que se puede comer) la que se propuso como una manera de alinear la nutrición a los ritmos circadianos, de esta manera para respetar periodos regulares y firmes pero influye en que es un procedimiento que "no fué bastante contrastado a nivel científico con lo que no se saben sus peligros".
"En pacientes con nosologías crónicas como la diabetes mellitus tipo 1 o en la insuficiencia renal crónica está contraindicado", apostilla para añadir que ciertos provecho para el organismo, que no están relacionados con el perder peso, tienen la posibilidad de ser la mejora del metabolismo de la glucosa (sensibilidad a la insulina, hemoglobina glicosilada, control glucémico, entre otros muchos) y la presión arterial, según los desenlaces preliminares extraídos de ciertos estudios.
Los géneros de ayuno intermitente tienen la posibilidad de clasificarse en 2 conjuntos, por una parte los métodos basados en cambiar días en los que se ayuna con días en los que se come con normalidad y los que consisten en limitar el número de horas en las que se puede comer. Actualmente, la restricción de la ventana de nutrición es el procedimiento mucho más estudiado en el ámbito de la investigación, tal como el que tiene mayor popularidad en la sociedad.
En relación con esto, la duración de la ventana de nutrición asimismo cambia desde las 6 hasta las diez horas entre los diferentes trabajos de investigación, apuntando que la evidencia a nivel científico con relación a su efectividad de qué forma procedimiento de control del peso del cuerpo "es muy escasa".
En preciso, muestra que por norma general, hasta hoy, los trabajos se realizaron en muestras "pequeñísimas y con intervenciones de poca duración" de la misma pasa con su viable empleo terapéutico en la diabetes mellitus tipo 2 o en comorbilidades de la obesidad como la hipertensión arterial o las dislipemias, entre otros muchos.