SANTA CRUZ DE TENERIFE, 27 Feb.
El Partido Popular de Canarias ha acordado personarse como acusación especial, frente a los hechos populares del 'caso Intercesor', para "adecentar" la imagen de Canarias y que este tema deje de ser novedad nacional, y asimismo a fin de que esos que han utilizado su cargo en beneficio propio acepten todas y cada una de las secuelas.
Así lo anunció en rueda de prensa el presidente del PP de Canarias, Manuel Domínguez, quien dijo que están "completamente perplejos" y "muy enfadados" con una trama que "se semeja bastante a los eres de Andalucía", ya que "semeja que se están copiando exactamente las mismas formas y exactamente las mismas mañas".
Manuel Domínguez lamentó que el Gobierno de Canarias "no hace sino más bien linkear un escándalo con otro" y criticó que el presidente, Ángel Víctor Torres, vuelva a "realizar el juego del avestruz" a fin de que "los inconvenientes pasen y no se vea perjudicado".
"Evitó charlar del 'caso Máscaras', esquivó el tema comentando de otras comunidades autónomas o presidentes autonómicos y vetó la comisión de investigación en el Parlamento de Canarias y en este momento lo realiza nuevamente con esta supuesta trama de corrupción", lamentó Domínguez.
Por ello, el dirigente habitual asimismo ha demandado al presidente Torres la celebración de un pleno increíble a fin de que dé explicaciones "pormenorizadas y detalladas" sobre este presunta trama.
Así ya que, solicitará al jefe del Ejecutivo canario que aclare en este pleno por qué razón el entonces directivo general de Ganadería, Taishet Fuentes, fue cesado y se le dejó que fuera candidato a la Alcaldía de Antigua, si el funcionario que fue apartado trasladó alguna "información sensible" a la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca, Alicia Vanoostende, o a qué tiene relación el 'intermediario', Marco Antonio Navarro Tacoronte, en el momento en que asegura que asimismo se encontraba implicada en esta supuesta trama de corrupción la Consejería de Sanidad.
Al mismo tiempo, el Partido Popular de Canarias ha pedido la dimisión de la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca, "no por buscar una cabeza de turco, sino más bien por admitir en comisión parlamentaria que todos y cada uno de los controles habían funcionado, con lo que ha faltado a su deber de supervisión", manifestó Domínguez.
El líder de los populares canarios apuntó, además de esto, que este es un "escándalo de dimensiones ignotas" que "ahora salpica" aun al Gobierno de España, por eso el Partido Popular asimismo haya pedido la comparecencia de la ministra Calviño, presidenta de la Fundación Internacional Iberoamericana de Administraciones y Políticas Públicas (FIIAPP), que en teoría dio contratos por un valor de 2 millones de euros a esta supuesta trama de corrupción.
Manuel Domínguez asimismo se ha referido a las afirmaciones de Marco Antonio Navarro Tacoronte en las que asegura que el presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, le envió un mensaje con la intención de "reventar" el Ayuntamiento de Los Realejos y "eliminar" al propio Domínguez.
"¿A qué tiene relación el 'intermediario' con que va a reventar el Ayuntamiento? ¿Qué guerra sucia estaban proponiendo para destruirme?", se preguntó el ex- alcalde del ayuntamiento norteño, quien advirtió que, en el caso de que sea verdadero este tema, querría decir que "ciertos líderes del Partido Socialista se habrían servido de esta trama mafiosa para liquidar y para eliminar a un contrincante político".
Domínguez logró hincapié en que no es posible que el máximo dirigente de la Administración insular "desee ir en contra" de 40.000 vecinos que tiene el concejo de Los Realejos: "No es de recibo que un presidente del Cabildo logre realizar esta clase de manifestaciones. Si de este modo fuera, debería irse ahora; si no fuera de este modo, vamos a reclamar responsabilidades".
A su vez, deseó dejar en claro que el PP "no se quedará de brazos cruzados" y reconoció que será "atacado" y también "insultado" por esos que dirán que o sea "oportunismo político", algo de lo que disiente, por el hecho de que eso es "emplear los cargos para reventar y eliminar a un contrincante político". "Si alguien cree que no es oportuno que encabece el Gobierno de Canarias, que me gane en las urnas", retó Domínguez.
