SANTA CRUZ DE TENERIFE, 18 Oct.
El vicepresidente del Gobierno de Canarias y asesor de Hacienda, Román Rodríguez, ha adelantado este martes que el Ejecutivo ha gastado hasta agosto un total de 50 millones de la partida de crédito de cien millones sosprechada en los capitales autonómicos del actual año y tiene en compromiso otros 30 millones, primordialmente para ayudas a la vivienda y reposición de infraestructuras en los ayuntamientos damnificados.
En contestación a una pregunta del Grupo Nacionalista en comisión parlamentaria ha apuntado que su Consejería permite los créditos precisos a demanda de los departamentos del Ejecutivo y piensa que a fin de año se van a poder sobrepasar los 120 millones -sin contar los episodios 1 y 2--.
Ha señalado asimismo que si hubiese que asistir al endeudamiento, como propuso CC-PNC, se podría llevar a cabo, pero no lo ve preciso, además de que desde 2024 "vienen curvas" en la economía y hay que contener el gasto estructural de la red social autónoma.
No obstante, sí ha reconocido que es necesario un "instrumento operativo" que canalice la reconstrucción de la isla pues si cada administración comienza a realizar sus competencias "se impondrán la dispersión y la ineficacia".
Lady Barreto (CC-PNC) ha aceptado que "es necesario dinero" para emprender todas y cada una de las pretensiones que tiene la isla y por este motivo ha pedido al Ejecutivo que asista a un préstamo para aumentar los fondos ya que aún no se han comprado los 30.000 euros de indemnización por vivienda o está denegada la construcción de ofertas en Tazacorte.
Asimismo ha detallado que faltan psicólogos para atender las solicitudes de los damnificados y subvencionar los costos de las fincas asoladas por la lava, valoradas en unos 108 millones.
Barreto comprende que "no es bastante" la partida de 97 millones en el momento en que los daños totales en la isla alcanzan los 982 millones con lo que espera un préstamo del Ejecutivo para lograr volver a poner infraestructuras y producir "un medio de vida" que evite el despoblamiento de la isla.