SANTA CRUZ DE TENERIFE, 25 de febrero. En una reciente sesión de control en el Parlamento de Canarias, el vicepresidente y consejero de Economía, Manuel Domínguez, perteneciente al Partido Popular, prefirió no entrar en el fondo de las acusaciones lanzadas por el empresario Víctor de Aldama contra Ángel Víctor Torres, actual ministro de Política Territorial. Domínguez optó por desviar la discusión hacia la vida privada del político socialista.

Ante la pregunta formulada por el Grupo Socialista sobre las polémicas afirmaciones de Aldama, quien acusó a Torres de utilizar un apartamento en Madrid financiado por la conocida 'trama Koldo' para encuentros con prostitutas, el consejero respondió con una simple observación: "Si ha ido a un piso, allá él".

Domínguez enfatizó que todos, incluido Torres, son libres de buscar su felicidad de la manera que decidan y agregó que no es quien para juzgar las acciones ajenas en su vida personal. Sin embargo, dejó claro que sí le importaría si el ministro utilizara recursos públicos en sus actividades privadas.

El vicepresidente recalcó que era la primera vez que abordaba el tema de las alegaciones en cuestión y lo hizo a requerimiento de los socialistas, insistiendo en que su interés no radica en lo que el ministro haga fuera de su ámbito profesional, a no ser que eso implique fondos públicos de los ciudadanos canarios.

Además, Domínguez afirmó que jamás intervendrá en la vida personal de otro individuo y se centró en exigir "transparencia y decencia" por parte de los socialistas, criticando a la presidenta del Grupo Socialista, Nira Fierro, por haber compartido videos suyos en la anterior legislatura, siendo consciente de que eran falsos.

El consejero del PP no dudó en acusar al partido socialista de haber dañado la imagen de Canarias con escándalos como el caso de "Tito Berni" y la adquisición de mascarillas fraudulentas por valor de cuatro millones de euros, entre otros, vinculando estos incidentes a la situación actual que rodea al 'caso Koldo'.

"Si no creyera en la decencia y en la transparencia, estaría en el Partido Socialista", afirmó Domínguez, al tiempo que bromeó sobre la lealtad que Fierro muestra hacia su líder, sugiriendo que podría estar en riesgo de sufrir un destino similar al de Torres por ser considerado un "adulón" de Pedro Sánchez.

Por su parte, Fierro respondió solicitando respeto hacia las instituciones y la política, y recalcó que no deben cruzarse las fronteras que separan los debates políticos de la vida personal de los individuos. A pesar de que Torres desmintió los rumores sobre encuentros inapropiados, presentando pruebas de su ubicación en ese momento, Fierro insistió en que algunos aliados de Domínguez en el PP han echo eco de informaciones que oscilan en esa dirección.

En un tono crítico, advirtió sobre la falta de juicio de algunos dirigentes del PP, quienes continúan prestando atención a las insinuaciones de un "delincuente confeso" como Víctor de Aldama. "Es necesario que sus compañeros de partido abandonen este rumbo, dejando de lado las falsedades sobre una persona honrada como lo es Ángel Víctor Torres", concluyó.