En un intenso intercambio de opiniones, Rosa Dávila, presidenta del Cabildo de Tenerife por Coalición Canaria (CC), defendió la implementación de una tasa turística en la isla, mientras que el vicepresidente Lope Afonso, del Partido Popular (PP), se mostró en contra y reafirmó la postura de su partido durante una reciente comunicación a los medios.

En la jornada del miércoles, los líderes locales hicieron énfasis en sus diferencias en relación con una propuesta que será discutida por los nacionalistas en su congreso insular este fin de semana. A pesar de las discrepancias, ambos señalaron que no existe tensión en el pacto de Gobierno actual.

Durante la rueda de prensa, Dávila argumentó a favor de la tasa turística, mencionando que es una práctica eficaz en varias regiones como Marruecos, Francia y Baleares. Ella sugirió que, dada la afluencia de 6,5 millones de turistas en el último año en Tenerife, la isla está en una posición óptima para la introducción de esta medida, la cual podría generar alrededor de 100 millones de euros, que se reinvertirían en el desarrollo local.

La presidenta destacó que el acuerdo entre los partidos es firme y se está cumpliendo, pero también enfatizó la libertad que tienen para proponer iniciativas, afirmando que "no somos clones ni sectas, somos entidades con un compromiso de gobernabilidad".

Dávila también explicó que el partido debe celebrar primero el congreso antes de considerar la implementación de la tasa, justificando su cambio de opinión respecto a la propuesta, ya que antes se había opuesto. Aseguró que su partido está atento a las demandas de la sociedad, citando ejemplos como el puerto Fonsalía.

La presidenta concluyó que cualquier cambio debe ser realizado en un contexto de estabilidad y previsiones optimistas, y expresó que la tasa podría ser un mecanismo para proteger el medio ambiente y mejorar la vida de los residentes de la isla.

Por su parte, Afonso reafirmó el respeto hacia la autonomía de CC para evaluar sus propuestas, pero dejó claro que la postura del PP es firme y no ha cambiado. "No estamos considerando ninguna variación en nuestra posición", indicó.

El vicepresidente hizo un llamado a un diálogo "maduro" sobre el impacto del turismo en la isla, subrayando que la discusión no debe centrarse únicamente en la recaudación, sino en la ordenación y gestión de las actividades turísticas.

Además, Afonso mencionó que ambos partidos comparten una "posición conjunta" en cuanto a la intervención en áreas de alta demanda, sugiriendo que las tasas podrían ser utilizadas para mejorar la conservación y la experiencia de los visitantes.

Finalmente, enfatizó la importancia de abordar la propuesta de la tasa turística desde una perspectiva responsable y madura, asegurando que cualquier decisión se tomará considerando adecuadamente las implicaciones y beneficios para Tenerife.